lunes, 24 de marzo de 2008

C E L U L I T I S

Recuerdan a la Reina mala de Blancanieves cuando preguntaba a su espejo, "espejito, espejito, ¿qué mujer tiene la piel más bonita?. Usted mi reina, es la mujer más bella y con la piel más hermosa del reino. ¿Acaso no hemos soñado todas con tener algún espejo que nos diera cada mañana la misma respuesta?.
Llega la primavera y con ella el momento de estar preparadas para lucir el palmito bajo los primeros rayos de sol. Momento perfecto para algunas privilegiadas y temido para la mayoría de nosotras. No se preocupen, muchas de nosotras sufrimos ese problema y por eso intentaremos buscar algunas soluciones para lucir nuestros cuerpos como sirenas.


¿Qué es la celulitis?

El término celulitis se utiliza para describir un defecto estético que causa gran insatisfacción a millones de mujeres en todo el mundo. Esta palabra francesa se adoptó como voz popular en los Estados Unidos, antes de que los médicos americanos y la literatura científica, se interesaran por un trastorno que los médicos europeos habían estado tratando durante ciento cincuenta años. La correcta traducción inglesa del francés sería celulitis, sin embargo este término solo se utiliza para describir un proceso inflamatorio o infeccioso que afecte a la piel. Por ello los médicos suelen denominarla con el término "dermopaniculosis deformante o adiposis edematosa". Para que puedan comprender un poco mejor como se desencadena, es importante hablar de sus características estructurales.

El tejido subcutáneo es el que se encuentra inmediatamente debajo de la superficie de la piel y se une a ésta de forma laxa al tejido o huesos subyacentes. Este tejido contiene células grasas en número y tamaño que varía en cada persona y es, pecisamente, la estructura que se altera en la celulitis, el comúnmente llamado "tejido adiposo". El tejido de los muslos está compuesto por tres capas de grasa, con dos planos de tejido conjuntivo intercalados. La estructura básica del tejido subcutáneo de los muslos es diferente en hombres y en mujeres, como puede observar en las figuras que a continuación le mostramos.
En las mujeres, la capa superior del tejido subcutáneo consta de lo que se ha denominado cámaras de células grasas de disposición vertical, que están separadas de paredes arqueadas y radiales del tejido conjuntivo, que se unen a la dermis. Por el contrario, la parte superior del tejido subcutáneo de los hombres es más delgado y tiene una malla de paredes de tejido conjuntivo entrecruzadas. Además la dermis, que es la estructura de tejido conjuntivo presente entre la piel y el tejido subcutáneo, es más grueso en ellos, que en nosotras. Esta es la razón principal por la cual observamos este problema principalmente en las mujeres. ¿Acaso pensaba que era exclusivamente un problema de mujeres?. No, ambos podemos sufrir este trastorno.

A medida que las mujeres envejecemos, la dermis se vuelve más delgada y se hace más flácida. Este hecho permite a las células grasas migrar hacia esa capa. Además, las paredes del tejido conjuntivo existentes entre cámaras de las células grasas también adelgazan y permiten que esas cámaras aumenten su tamaño de una manera exagerada.


¿Cómo detectarla?

Una prueba sencilla para ilustrar estas diferencias es la prueba del pellizco. Al pellizcar la piel de los muslos, se produce el fenómeno de colchón, es decir, la aparición de hoyuelos, abultamientos y deformación de la piel, mientras que en la mayoría de los hombres la piel se arrugará, pero no aparecerán ni hoyuelos ni abultamientos.

Características para reconocerla


Aparecen hoyuelos, abultamiento y deformación de la piel.
En el 90% de los casos afecta a las mujeres.
Entre lo síntomas están la sensación de tirantez y pesadez en las áreas afectadas.
La sensibilidad de la piel es bastante evidente cuando se pincha, se presiona o se somete a un masaje vigoroso.

Dónde suele aparecer

En las mujeres suele localizarse la celulitis en:

En los muslos y nalgas (principalmente)
En brazos (parte superior)
En el vientre (zona inferior del abdomen)

En los hombres, es mucho menos frecuente, pero si aparece se localiza principalmente en:
En la nuca
En el vientre (zona inferior del abdomen)
En los brazos (parte superior)

Clasificación de la celulitis

Grado 0
Es la fase en la que la piel de piernas y muslos presenta una superficie lisa cuando el sujeto está de pie o tumbado. Si se pellizca la piel (prueba del pellizco), se pliega y arruga, pero no aparecen hoyuelos ni bultos. Es el estado normal de la mayoría de hombres y mujeres jóvenes.
Grado 1
Es la fase en la que la superficie de la piel permanece lisa mientras el sujeto esté de pie o tumbado, pero la prueba del pellizco es claramente positiva para el fenómeno del colchón. Es el estado normal de la mayoría de las mujeres, pero en los hombres puede ser un signo de deficiencia de hormonas androgénicas.
Grado 2
Es la fase en la que la superficie de la piel es lisa cuando el sujeto está tumbado, aunque aparece el fenómeno de colchón cuándo está de pie. Este estado es normal en mujeres rellenitas y de edades comprendidas entre los 28 y los 35 años.
Grado 3
Es la fase en la que el fenómeno de colchón es evidente cuando el sujeto está tumbado o de pie. Es muy habitual después de la menopausia y en personas con sobrepeso.
Aunque la mayoría de las mujeres consideran el estado 0 como situación estética ideal, la mejor clasificación que cabe encontrar en la mayoría es el estado 1, debido a la predisposición estructural.

De qué depende la celulitis

Predisposición genética.
Del equilibrio dietético y sobre todo de la carencia de proteínas combinadas con un consumo excesivo de azúcares refinados.
Del estrés.
De problemas venosos y trastornos de la microcirculación.
La falta de sueño, un consumo excesivo de tabaco o excitantes y la falta de ejercicio.

TRATAMIENTO

Como es habitual, la mejor medida es la prevención. Sin embargo, dado que el número y tamaño de las células grasas de una persona está determinado por la nutrición prenatal materna, muchos de nosotros sufrimos una predisposición importante.
La reducción de peso y la práctica de ejercicio son medidas que pueden utilizarse en el tratamiento de la celulitis y de hecho, debe ser el método primario de tratamiento. No obstante, la reducción de peso debe ser siempre gradual, especialmente en las mujeres mayores de 40 años, ya que a partir de esa edad la piel va perdiendo su elasticidad y a menudo hace que el fenómeno de colchón sea más evidente. No olvidemos, que las hormonas juegan un papel muy importante en la celulitis. Las mujeres que no han tenido celulitis a lo largo de su vida, suelen notar que la padecen cuando empiezan con la menopausia. Y aquellas que ya la padecían de jóvenes, notan un incremento de la misma, a partir de los 50 años. A esto se une el hecho de que la mujeres cuando son jóvenes acumulan depósitos de grasa en las extremidades, como muslos, nalgas y vientre, ya que fisiológicamente están preparadas para tener hijos y debe proteger esa zona (lo que llamamos cuerpo ginoide o en forma de pera), sin embargo cuando vamos creciendo tendemos a acumular más grasa en el tronco, fenómeno fisiológico común, ya que necesitamos proteger nuestros órganos internos (cuerpo androide o en forma de manzana).
Como dijo Hipócrates, "deje que su alimento sea su medicina y su medicina su alimento". Realmente llevar una dieta sana y equilibrada es una condición fundamental para mantener a raya la celulitis. Para ello debemos privarnos de ciertos alimentos que no sólo no nos aportan nutrientes, sino que además nos hacen acumular grasa, tapando nuestras arterias y empeorando nuestra circulación. Estamos hablando de los productos refinados, los fritos y las grasas saturadas.
La dieta óptima para paliar este trastorno, como se podrán imaginar, está compuesta de verduras, frutas, cereales integrales y legumbres (ricos en fibra), frutos secos y semillas (excelentes fuentes de ácidos grasos omega 6), pescados blancos y azules (ricos en ácidos grasos esenciales omega 3). Incluya en su alimentación perejil y jengibre, ya que actúan como diuréticos y desintoxicantes del organismo.
Es recomendable que no beba alcohol y bebidas carbonatadas, que no fume, ya que de ellos derivan sustancias tóxicas que pueden acumularse en el organismo. Intente beber mucha agua, entre 1.5-3 litros diarios.
Con respecto al ejercicio le recomendamos que haga un mínimo de 20-30 minutos 3 veces por semana. Los ejercicios aeróbicos son los más adecuados, ya que ayudan a eliminar la grasa corporal más rápido. En numeroso estudios, hemos encontrado una relación directa entre llevar una vida sedentaria y una alimentación inadecuada, con un incremento de la celulitis.

Alimentos recomendados:

Frutas
Verduras
Tomates
Ajos
Alfalfa
Pepino
Cebolla
Piña
Papaya
Limón
Pomelo
Perejil
Col
Repollo
Hinojo
Zanahoria
Cereales integrales ( Avena, Mijo, Cebada...)
Zumos depurativos
Caldos vegetales
Tisanas
Apio
Rábanos
Hojas de Diente de León

Alimentos prohibidos:
Bebidas gaseosas

Café
Alcohol
Carnes rojas
Grasa animales
Embutidos
Salsas
Especias
Comidas enlatadas
Conservas
Fritos
Sal
Dulces
Carbohidratos refinados

No hay comentarios: